Jairo es un admirador de artistas tan diversos como Remedios Amaya, Rubén Blades María Terremoto o de, casi con devoción, de Juan Luis Guerra. Y de Alejandro Sanz, Antonio Carmona, Israel Fernández, El Pele, María Toledo… ¿Será alguno de ellos?

Entrevista con Jairo de Remache

No es la primera vez que habrás escuchado el nombre de Jairo de Remache. Y quizá no tanto por su trabajo desde niño como cantante, compositor e instrumentista, sino porque es quién dio vida al éxito de Omar Montes «La llama del amor», éxito gracias a su composición y cointerpretación. Por Montse Ambroa, ALL FLAMENCO

Pero él ya llevaba mucho tiempo en esto de la música. Siguiendo los pasos de su padre, Antonio Remache, reconocido compositor de canciones como «Quien Te Va a Querer», de Niña Pastori, y «El Beso», de Israel Fernández, entre otros grandes himnos del género flamenco, Jairo empezó a tocar y cantar en la iglesia evangelista desde muy pequeñito.

Hasta llegar a este 2023, que empieza fuerte con el estreno, el 9 de junio, de “Pa Olvidarte”, tema adelanto del EP producido por BMG que disfrutarás tras el verano con 5 canciones + un bonus track y que promete ser un bombazo total.

Este primer tema es un aperitivo rumbero que habla del desamor con toda la emoción aflamencada que nace de Jairo de Remache. (Debajo tienes el link para que lo escuches).

¡DALE AL PLAY! Que «Pa Olvidarte Me Fui» te va a encantar…

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Entrevista con Jairo de Remache

En «Pa Olvidarte», Jairo de Remache suena muy rumbero, pero habla de desamor. ¿Qué te inspiró?

¡Quién no ha sufrido por amor! Es un sentimiento universal, ¿verdad? En realidad, parte de un texto que me compartió mi querido Antón Muñoz, que es parte de mi familia y mi amigo. Despertó en mí una curiosidad tremenda, obligándome a sumergirme en sus frases y dar forma a esta maravillosa letra que ambos compartimos.

Háblanos de otro amigo, de Omar Montes, que hizo muy famosa una de tus composiciones, «La llama del amor», que aparece, además, en el EP como bonus track.

Este tema ya estaba escrito cuando Omar me llamó para que colaboráramos. Él ya lo había escuchado y durante bastante tiempo lo interpretaba cada vez que podía… Y me pareció estupendo cuando me dijo que quería cantarlo conmigo. Yo no tenía los medios necesarios para llevarlo a donde él sí, así que estaba encantado.

Esto de vivir de la música no debe ser fácil, pero imagina que te conviertes en una súper estrella con esta canción…

Ojalá pudiera vivir siempre de la música, ese es mi mayor deseo. Hasta ahora lo he podido conseguir y este disco espero que sea importante para mi carrera. Pero soy una persona que no busca ni estrellato ni cosas así, aunque claro, a todo el mundo le gusta gustar… Me conformo con disfrutar del momento y poder transmitir a través de mis canciones.

Es que empezaste desde bien pequeño, según me han chivado.

Sí, desde que nací (risas). Soy hijo de un cantautor, así que levantarte todos los días rodeado de música te influye. Y, encima, yo tengo esa pasión por dentro. Empecé con la percusión, con el cajón, la conga, la batería…Me podías ver más con la batería cuando tenía 11 o 12 años acompañando a mi padre en las giras en los teatros y en las iglesias. Estar de lunes a lunes cantando con música espontánea y acompañarla como puedas, sin escaleta ni nada, un poco improvisando, me ha dado muchas tablas, ha sido un gimnasio.

Así que cuando me hice más mayor, decidí que quería estar en los escenarios también cantando mis propias composiciones. Soy feliz componiendo e interpretando lo que nace de mí. Me encantaría que la gente empatizase con mis temas, que la gente escuche y dé la oportunidad a mis canciones.

Quiero transmitir emociones. Todo lo que reflejo en mis canciones son parte de mis vivencias, de mi vida personal. Y de esa espiritualidad de mis inicios en el culto religioso

A pesar de tus raíces gitanas y flamencas, quizá los más puristas no vean tu música como flamenca. De hecho, te han criticado por esa colaboración con Omar Montes en las redes sociales.

No creo que el flamenco deba estar encajonado, pero también es cierto que no me parece bien que algunos artistas se pongan la etiqueta de flamencos cuando lo que hacen puede ser, como mucho, aflamencado, pero no flamenco. Estoy pensando, por ejemplo, en ese «flamenquito del sur», como le llamamos, que de flamenco tiene bien poco, pero no quiero dar nombres…

Entonces, ¿tú eres un artista flamenco?

Soy un cantautor de fusión, quizá con matices de flamenco-pop, pero no un cantante de flamenco. Mi música es de autor, con matices de flamencura y de otros géneros. Tiene flamencura, lo llevo en la sangre, no se puede evitar en mis temas. Es como si me preguntases si Alejandro Sanz es flamenco. Te diría que no, ¿pero a que pellizca flamenco? O lo que hace Rosalía ahora, que es más urban flamenco. Transmite flamenco aunque no lo sea.

Al final, ser flamenco es algo más profundo, y si lo llevas dentro, lo harás moderno, pero se notará que estás haciendo un palo del flamenco. Pienso que este asunto nos puede llevar también a un debate que existe sobre el flamenco y su diferencia con la música gitana. Como decía Camarón de la Isla, uno no se puede desprender de esa gitaneidad al interpretar.