A punto de cumplir 20 años, Yoel Vargas acaba de ganar el premio Desplante en el Festival del Cante de las Minas. Un galardón que le da ánimos en una carrera como bailaor flamenco y coreógrafo nada fácil hoy en día. 

Acompañado de sus padres y con muchos nervios, este bailaor nacido en Tarragona acudía a La Unión para concursar por el premio Desplante al mejor de 2023 en este certamen murciano. En la semifinal interpretó seguirilla y taranto, y en la final, taranto. Y ganó. 

No es que sea la primera vez que se lleva un premio, pero reconoce que sí el primero de esta magnitud. En su haber ya tiene, entre otros, el de la Fundación AISGE al «bailarín excelente». 

Y, en pleno puente de la Paloma, en pleno aterrizaje de ese momento mágico, ha tenido la amabilidad de atendernos y contarnos un poco más de él y de su amor por el baile flamenco: «No quiero que se pierdan tradiciones como bailar con mantón de Manila, pero también me gusta incorporar elementos más actuales», nos adelanta. 

¿Qué pensantes cuando supiste que eras oficialmente el mejor bailaor del festival?

¡Fue espectacular! Estaba menos nervioso que cuando gané en la semifinal, porque ya me sentía ganador con ser finalista. Pero, claro, ganar un premio de este nivel es un trampolín para un artista, y pensé eso, la verdad. Dedicarse a la danza es muy duro y estos reconocimientos dan ánimos y oportunidades. 

Y hay que añadir que no es pequeño el premio económico, que creo que son 6.000 euros. 

Sí, es esa la cantidad. Esta carrera es muy cara, ya desde el primer momento. Toda ayuda es bienvenida, pero casi más que ese dinero en concreto, este tipo de galardones coloca a los artistas en mejor posición para poder recibir apoyo de las administraciones. 

¿Cómo has preparado tu participación en el concurso?

Llevaba tiempo dando vueltas a la idea. Hasta que sobre el mes de diciembre del año pasado, me puse con el guitarrista Noño Santiago a preparar una coreografía nueva, el montaje, los pasos… Noño ha sido mi tocaor en el festival, y le debo mucho, porque me hace «un traje a medida», y eso es un privilegio. 

Un privilegio también el que me haya acompañado el gran cantaor Enrique el Extremeño. Cuando supe que estaría conmigo en La Unión, me emocioné. 

No quiero dejar de mencionar a José Cortés El Indio al compás y a otro cantaor, Miguel Ortega. Solo he recibido amor y apoyo de todos ellos. 

¿Ya le has buscado sitio al trofeo?

En casa de mis padres. No hay un lugar mejor. Tanto mi padre, como mi padre como mi hermana me apoyado desde el principio. Me ayudan, me alientan y están siempre ahí. También son mis peores críticos (risas). 

¿No se asustaron cuando les dijiste eso de «quiero ser artista»? 

Nunca se lo tuve que decir tan explícitamente. Sucedió poco a poco. Veía a mi hermana a bailar y con solo tres añitos ya la imitaba. Además, en mi casa el arte está muy presente. Mi padre es un gran aficionado a la pintura, mi madre al estilismo, la moda; suena música de todo tipo, desde jazz a, claro, flamenco… No he tenido problemas en ese sentido, soy muy afortunado. Y han hecho muchos esfuerzos para que pudiera estudiar y dedicarme a lo que me gusta. 

Parece que lo has tenido fácil…

En el aspecto familiar, sí, pero te aseguro que esto es muy duro. Echas muchas lágrimas, cuesta mucho darse a conocer y no se apoya  a la gente joven que nos queremos dedicar al baile. No quiero transmitir con esto que no se pueda, solo que hay que sudar mucho. Pero si se quiere y se es constante, se consigue.

Los grandes referentes para este bailaor son Carmen Amaya o Antonio El Bailarín y Antonio Gades. Entre los artistas de otras disciplinas, desde Paco de Lucía, Enrique Morente o Sabicas, a Vivaldi. 

Actúas en distintos tablaos de Madrid y otras zonas de España. ¿Cómo es para un bailaor flamenco este tipo de escenarios tan denostados entre los aficionados?

Actúo en tablaos cuando no estoy de gira. Por ejemplo, en El Cordobés, en Flamenco de Leones, Los Porches o Las Carboneras. A mí me parecen lugares perfectos para estar cerca del público y también son un termómetro para probar cosas nuevas, ver si un paso o una coreo funcionan o no. En un tablao sale la verdad de tu flamenco. 

Yo preparo siempre mis actuaciones al máximo, sean estas donde sean. Además, son de los pocos sitios en los que un artista flamenco se puede dar a conocer y ganar dinero por su trabajo. Fíjate si los respeto, que creé una coreografía con el nombre de «Flamenco, Tablaos». La estrené en Tarragona en el mes de marzo. 

Tú has tenido la suerte de poder entrar en la compañía de Manuel Liñán, ¿sigues en ella?

En efecto, continúo en ella, y doy las gracias por estar cerca de Manuel Liñán, que es un maestro para mí. Es muy generoso y nos transmite lo que sabe. Gracias a ello, viajo por el mundo y aprendo muchísimo.  

Yoel creó su primera coreografía con solo 13 años en Berlín para su actuación. Esa labor creativa la ha continuado con otros espectáculos como el mencionado «Flamenco Tablao» o «La Flor de Granada». 

¿A qué otros maestros recuerdas con cariño?

A mis profesores del Conservatorio Profesional del Institut del Teatre de Barcelona, donde me titulé; a Inés Rubio y a José Manuel Álvarez. Cuando me junto con compañeros en Amor de Dios, también aprendo, y en los viajes, claro.  

Aparte de lo formal, ¿qué enseñanza te llevas de esos primeros años? 

La disciplina. En el Institut de Barcelona teníamos un calendario de preparación y trabajo muy concreto e inamovible. Eso se ha quedado en mí y lo agradezco. Un bailarín debe cuidarse mucho y tener disciplina es lo mínimo para ello. Cuando no estoy trabajando, voy al estudio y realizo mis ejercicios, sin que falte ninguno. 

Y la vida personal, ¿para cuándo? 

Mi vida es la creación y el baile flamencos, estoy feliz pudiéndome dedicar a ello. No quiero ser el más famoso, solo poder desarrollarme y cumplir mis sueños.  

Me han dicho que uno de tus sueños es tener una compañía propia. 

Con el tiempo… Primero debo seguir creciendo y formándome. No es un objetivo, solo un sueño. Ya veremos qué me depara la vida. 

El bailaor en un defensor de la Escuela Bolera.
Yoel V. Ferré
Yoel Vargas en el Cante de las Minas.

Yoel Vargas en el Cante de las Minas.

Yoel-Ferre
Los premiados en la edición 2023 del festival de La Unión.

Los premiados en la edición 2023 del festival de La Unión.

Actuación de Yoel

Actuación de Yoel

El bailaor es un defensor de la Escuela Bolera.

El bailaor es un defensor de la Escuela Bolera.